Eso fue lo que le dijo al diario Bild el pasado mes de septiembre, cuando pensaba que, a sus 31 años y en el Sassuolo italiano, el fútbol podía llegar a su fase crepuscular. Está viviendo el Barcelona esta temporada un curioso cambio de paradigma sólo interpretable a partir de dos aspectos: el económico («no tenemos 100 millones para fichar a un crack», fue lo que dijo Valverde tras obtener la cesión del central colombiano Jeison Murillo), pero también el emocional. La sinceridad también le jugó una mala pasada en 2015. «A Messi se le cruzaron los cables con Luis Enrique», dijo Mathieu en Radio Montecarlo mientras en el Barça trataban de esconder la pelea entre el argentino y el técnico. Su fichaje por el Barça (cesión hasta final de temporada a cambio de un millón de euros, con una opción de compra de ocho millones) quizá sea una de las operaciones más sorprendentes del fútbol moderno.
A los pocos días de esa final (título ganado y gran actuación en el mediocentro de Toni Kroos, recién fichado), Xabi Alonso decidió aceptar la propuesta del Bayern, en rapidísima negociación que acabó en abrazo con Florentino Pérez y disgusto de Carlo Ancelotti, que deseaba seguir con él en la plantilla. Sin embargo, lo suplirán con la gran cantidad de buenos jugadores que acumulan arriba y la buena labor de Modric. El tablero, sin embargo, estaba inclinado desde el minuto 49: un equipo que se abocaba a su noveno partido sin ganar contra otro que encadena nueve victorias en diez partidos. Otro que puede abandonar el equipo es Luis Suárez. En La Liga, por ejemplo, el porcentaje de goles de Suárez y Messi casi alcanza el 50% (47,67%). Es decir: casi uno de cada dos tantos que ha marcado el Barça en liga han sido obra de Leo o Luis.
Entre todas las bromas que inundaron las redes, una fue «ya veréis cuando Messi salga al campo». Koeman, símbolo del Dream Team de Cruyff, prefirió ceder la posesión a su rival y aguardar en su campo. En su etapa de entrenador del OFI de Creta vivió de cerca los severos problemas económicos del equipo griego, llegando a poner dinero de su propio bolsillo para cubrir los salarios de los jugadores. Lo más extraño en esta ocasión es que se produjo en el túnel de vestuarios justo antes del partido, por lo que no se puede achacar a problemas de esfuerzo, hay algo más. «Hemos sido unos pardillos», clamó entonces uno de los dirigentes de mayor peso en el club, que no se preguntaba por qué Dembélé jugó aquella noche sólo los últimos ocho minutos, sino por qué Paulinho no salió del banco. 17.00 horas. El Zaragoza gana 0-3 al descanso al APOEL (ya ganaron los maños 5-0 en la ida) y estará en el sorteo del lunes 16 de diciembre donde quedará emparejado con uno de los ocho segundos clasificados de la fase de grupos. Le pasó a Vinnie Jones, el hombre que fue condenado a 100 horas de trabajos para la comunidad por morder la cabeza a su vecino y capaz de retorcer los testículos al mismísimo Paul Gascoigne.
Le definen generoso. Capaz de aparecer discreto en el Tony 2, el famoso piano bar de la bohemia capitalina, o de pasear tranquilo por Serrano con sus niños. «Era transparente». Y discreto. Compaginar el deporte con el negocio, especialmente el fútbol con el marketing es bastante complicado. En la imagen, vestido de calle y con las botas en la mano, se despedía del fútbol («beautiful game», decía) a sus 35 años y con suculentas ofertas del propio Bayern y también de Italia, Inglaterra y China encima de la mesa. El chico que en su presentación, en el ruedo del Camp Nou, rodeado de espectadores, equipacion barcelona 2020 ensalzó a su ídolo: Messi. 15:30 | Una nueva ‘novia’ para Leo Messi. Finalmente la llegada de Jorge Messi a Barcelona no ha sido hoy. Cierto. El Barcelona viene de llevarse por delante al decrépito Valencia de Celades. Y pese a ser un excelente lanzador de faltas, camiseta barça 2021 ni en el Valencia ni el Barça se atrevió a discutir la autoridad de la estrella. Fue allí donde el Barça de Luis Enrique desnudó su decrepitud.
Bendito destino. El día en que el Barça vuelve a jugar un partido fuera de casa en la máxima competición continental -tres derrotas en sus últimos cuatro partidos a domicilio-, Mathieu, ahora «liberado», es quien está en el otro bando. No sólo eso. El equipo azulgrana sólo ha podido salir victorioso en cuatro de sus últimos 13 duelos fuera de casa en la Champions. Al fin y al cabo, sólo jugó cuatro partidos en las dos temporadas que estuvo en el PSG, la 2012-13 y la 2013-14. De ahí se marcharía a la Juventus, donde estaría dos cursos más antes de recalar en un Bayern que le ha dado muchísimo más protagonismo. Nunca hubiera podido imaginar que estaría ayer posando con la camiseta azulgrana. En un comunicado la marca deportiva Adidas quiere aclarar, junto a la Real Federación Española (RFEF), que “el lanzamiento de la camiseta está fuera de cualquier connotación política”. David Beckham está en Barcelona. En el vestuario del Juventus Stadium, y después de que el Barcelona se dejara la vida continental en un primer acto que concluyó 2-0 (3-0 al final del choque), Luis Enrique arremetió contra varios de sus futbolistas. ‘Cataluña al límite’ conectará en directo con el palacio de la Moncloa, con el Senado, el paseo de Gracia en Barcelona y con las sedes del PSOE y Ciudadanos y contará con entrevistas con todos los portavoces de los diferentes partidos políticos así como con el presidente del Círculo de Empresarios, Javier Vega de Seoane.
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