En el año 1967, los dirigentes de las diferentes peñas crearon una federación que se legalizó en octubre de ese mismo años, para aglutinar y servir como nexo de unión entre el club y el peñismo. En 1998, por acuerdo del club, presidido por Manuel Ruiz de Lopera, y la inmensa mayoría de las peñas se procedió a la disolución de la federación, creándose una coordinadora, que formaría parte del organigrama del club.